La muerte de la joven fue hecha pública por la joven secretaria de Salud portuguesa, Eugenia Roccella, en el 21º Congreso Europeo de Microbiología Clínica y Enfermedades Infecciosas, informó la última semana ANSAmed. La funcionaria dijo que la joven de 16 años de edad sucumbió a un shock séptico causado por Clostridium Sordellii, una bacteria que ha matado a varias mujeres en Estados Unidos como resultado del uso de la RU-486.
Según el resumen presentado en el Congreso, la joven llegó a una sala de emergencia del hospital de maternidad cinco días después de cumplir con el régimen de medicamentos, quejándose de debilidad y calambres. Aunque estaba consciente al principio y que no tenía señales de fiebre, la joven empeoró en cuestión de horas y, a pesar que le practicaron una histerectomía de emergencia, murió 18 horas después de haber llegado al hospital.
A pesar del vínculo de la RU-486 con por lo menos ocho muertes en Estados Unidos, la industria del aborto estadounidense ha resistido en gran medida los lineamientos de la Food and Drug Administration [FDA] para su uso. La Federación Nacional del Aborto alienta a los abortistas a recetar la RU-486 dentro de los 63 días del último período menstrual – un agregado extra de dos semanas, más allá de los lineamientos de seguridad de la FDA.
Pero recientemente algunos Estados han comenzado a ponerse severos contra el uso imprudente del régimen de drogas: en Oklahoma, la semana pasada se firmó una ley para hacer cumplir las normas de la FDA, y Texas está considerando una legislación similar.
Un reciente estudio australiano ha encontrado evidencia que muestra que ese tipo de abortos químicos tiene una tasa de complicaciones muy graves mayor a la del aborto quirúrgico.
Haz click sobre el título