El padre de la chica de 15 años que había pedido a la Justicia mendocina que autorizara un aborto terapéutico para su hija, ya que adujo que la chica tiene una edad mental de 7 años y sufre serios problemas de salud, desistió de realizar la intervención porque los médicos le advirtieron que ponía en riesgo la vida de la menor.