La estadística del aborto alcanzó en España en 2007 una nueva cifra récord: 112.138 mujeres interrumpieron su gestación, un 10% más que el año anterior y el doble que una década atrás. El aumento de la tasa de abortos es especialmente acusado entre las mujeres jóvenes y las inmigrantes, lo cual indica que los factores sociales y culturales tienen un peso decisivo y que las medidas de prevención que se vienen aplicando son claramente insuficientes.
Las encuestas indican que un porcentaje nada desdeñable de jóvenes gestionan su vida sexual con una gran inconsciencia. Y eso se traduce no sólo en más embarazos no deseados y más abortos, sino también en un repunte de las enfermedades de transmisión sexual. Es necesario reforzar las campañas de prevención.